Erradicación de la pobreza y Vida Mejor

Erradicación de la pobreza y Vida Mejor

Por Marcio Enrique Sierra Mejía

En Honduras se ha producido un sutil cambio de visualización de la problemática asociada a la desigualdad y la exclusión social para bien de los ciudadanos y ciudadanas hondureñas. No es lo mismo estar enfatizando en que se debe erradicar la pobreza a que se deben hacer esfuerzos para tener una Vida Mejor.

Si bien al abordar la realidad social enfatizando en la erradicación de la pobreza el gobierno y la sociedad conducen los esfuerzos a atacar dimensiones que ahora se visibilizan por medio del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), también es factible realizar esfuerzos para visibilizar las dimensiones de la Vida Mejor con el fin de evaluar y monitorear las intervenciones públicas que tienen el propósito de dar Vida Mejor a las familias que sobreviven en condiciones de pobreza extrema y vulnerabilidad.

Mientras que se puede contar con un IPM que nos facilita ver la evolución de la pobreza al nivel nacional desde dimensiones apropiadas que utilizan la información obtenida por el INE mediante encuestas de hogares; el gobierno, también cuenta con las condiciones institucionales óptimas para obtener información focalizada territorialmente utilizando el instrumento del RUB que da cuenta no solo las dimensiones vistas en el IPM, sino que también otras dimensiones que las familias beneficiadas por la plataforma Vida Mejor facilita obtener.

Por ejemplo, al evaluar la evolución de la Vida Mejor desde la perspectiva ciudadana de lo que es tener ese estatus en las familias que están bajo condiciones de extrema pobreza y vulnerabilidad, las dimensiones e indicadores apropiados que se visibilizan, dan cuenta de niveles de Vida Mejor, alcanzados en las familias localizados al nivel de municipios y de aldea, más allá de la medición de la evolución de la erradicación de la pobreza al nivel del departamento.

El CENISS puede lograr un acercamiento econométrico favorable para impulsar desde mejor ángulo el proceso de medición de la transformación social en perspectiva innovadora e incluyente que puede ser pertinente para ver estadios de bienestar social con enfoque territorial.

Los ciudadanos y ciudadanas que viven en extrema pobreza y vulnerabilidad que están recibiendo y experimentando procesos de Vida Mejor dan la oportunidad de realizar un proceso de medición econométrico más apropiado para evaluar la evolución del bienestar social en Honduras.

Al considerar la Vida Mejor para observar el proceso de transformación social se incluyen dimensiones e indicadores que trascienden el alcance de la medición de la erradicación de la pobreza, lo cual no significa, que medir la evolución de la erradicación de la pobreza sea innecesaria. Por el contrario, son esfuerzos de medición que se complementan perfectamente para propiciar una evaluación del desarrollo social mucho más profunda.

Medir la evolución de la Vida Mejor nos permite apreciar dimensiones e indicadores que los mismos ciudadanos y ciudadanas han determinado. Son dimensiones que el IPM no alcanza a medir.

No se trata de propiciar la duplicación de esfuerzos de medición de la pobreza sino de contar con un abordaje econométrico apropiado a la política de vida mejor para la igualdad que incorpora dimensiones específicas al proceso de desarrollo de la Vida Mejor. Dimensiones como comunicación, temor a Dios, abandono, cambio de actitud, formación de valores y huerto familiar.

Es importante y significativo contar con una medición econométrica creada a la medida del proceso de desarrollo de la Vida Mejor. Ya lo decíamos anteriormente, no es lo mismo valorar la evolución de la erradicación de la pobreza a tomar dimensiones de valoración de la Vida Mejor que van logrando las familias extremadamente pobres y en vulnerabilidad. Ambos procesos de valoración econométrica son decisivos para apreciar adecuadamente las políticas públicas sociales. En ningún momento son procesos excluyentes sino complementarios y que dan mayores posibilidades de evaluación y monitoreo de la realidad social.

Tanto el INE como el CENISS son entidades que trabajan de la mano y pueden darnos una perspectiva de apreciación estratégica del desarrollo social bastante inteligente para valorar el proceso de las políticas públicas sociales desde distintos ángulos de medición. Se trata de aprovechar la voluntad política que existe por parte del Presidente JOH en profundizar la medición del impacto del esfuerzo para mejorar la vida de los pobres de Honduras.