Un futuro sombrío: “la economía”

Por Mario E. Fumero

La economía mundial está sostenida por una falsa utopía de un papel que representa un valor ficticio, que en realidad no representa un valor real de su poder adquisitivo, porque la humanidad está endeudada más allá de lo que es su Producto Interior Bruto (PIB).

El dinero se inventó como es un medio de pago universalmente aceptado que evita el trueque en las transacciones económicas, y su valor es relativo, pues mide lo que se produce, y también el tiempo de trabajo, aunque originalmente, el dinero estaba respaldado por una cantidad de metal precioso. El estándar usual para respaldar la moneda era el patrón oro, esto quiere decir que cada pieza de metal equivale a una cantidad determinada y fija de dicho metal. Sin embargo esto es utópico, porque el valor de papel depende de muchos otros factores.

Todos los economistas, y cualquiera que tenga cinco dedos de frente, es consciente que detrás del valor del dinero, existe una economía en quiebra, porque todo los países operan en déficit, porque se apoyan del dólar americano y esta nación está al borde de la quiebra, porque su déficit, endeudamiento y crédito sobrepasan el supuesto poder adquisitivo y su respaldo en oro. Según informes del 2015 “el déficit de Estados Unidos fue de 17.500 millones de dólares en datos brutos, un aumento de 71.6 % en un año, pero inferior a las previsiones de los analistas que apuntaban a un déficit de 19.000 millones”. Y con estos parámetros indudablemente vamos hacia un caos impredecible.

Entre las profecías bíblicas de los últimos tiempos se habla de una aguda crisis económica. En apocalipsis 6:5 se habla de un caballo negro que trae una balanza, y según el contexto del verso 6 establece que dicha balanza está relacionada con la economia pues dice “Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino”.

Revelando dos hechos sobresalientes: la inflación y la escasez de alimentos. En esa época un denario era el equivalente a lo que un jornalero ganaba en un día de trabajo. El trigo representa el maíz, y la cebada representa en nuestra cultura el frijol, lo que establece precios exorbitantes de los alimentos básicos.

¿Cuál es el valor del dinero? Su valor representa esta suma: producción + trabajo + demanda = valor. O sea, el dinero representa lo que producimos para vivir. Si no hay producción agrícola, ni ganadera ni avícola o marítima, ¿cómo podremos sobrevivir? El mundo está abocado a la producción tecnológica y de distracción, olvidando la producción alimenticia. El cambio climático y la contaminación destruyen la producción de alimento, y la población crece a ritmo acelerado. En conclusión, vamos hacia un desplome de la economía y hacia una hambruna mundial, de proporciones alarmantes.

¿Podemos comernos los celulares, televisores, carros y objetos suntuosos? Nuestra riqueza no está en los bienes de consumo superfluos. El papel moneda representa la supervivencia de alimentos. Así que sin producción alimentaria, el papel moneda, por más que se imprima, no vale nada.

Repito, el mundo va hacia un caos económico irreversible, y tenemos que prepararnos para el derrumbe de la economía.

La moneda hondureña, el lempira, está sujeto al dólar americano. Si el dólar cae, nuestro lempira se va a pique. Ya Lempira perdió la pluma, y se quedará sin taparrabo, y nos hundiremos, porque la economía actual es ficticia, y las deudas nos consumen. Así que no confíes en el dinero, pongamos nuestra fe en Dios y preparémonos para subsistir en los terribles tiempos que se avecinan, porque serán tiempos de hambruna y epidemias, como dice Apocalipsis 6:8.