Los personajes oscuros de JOH
Los personajes oscuro
s de JOH
RAMÓN CUSTODIO
Lo temático se relaciona a un tema, especialmente gramatical; lo que se arregla, ejecuta o dispone según el tema o asunto de cualquier materia y, finalmente, temoso es el conjunto de temas parciales del asunto general. En cambio, temático es el que agotado el tema insiste en lo mismo, un rasgo de personas tóxicas cuya necedad desafía al extremo la paciencia de todos.
Ser militar o ser policía son dos cosas muy diferentes, por eso los constituyentes plasmaron la diferencia entre las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional en la Constitución de la República de 1982, vigente. De las primeras el Artículo 272 dice, “Las Fuerzas Armadas de Honduras son una Institución Nacional de carácter permanente, esencialmente profesional, apolítica, obediente y no deliberante. Se instituyen para defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, el imperio de la Constitución, los principios del sufragio y la alternabilidad de la presidencia de la República. Cooperarán con la Policía Nacional en la conservación del orden público”.
Cooperarán no quiere decir que las sustituirán, en ninguna circunstancia ni bajo otro nombre; cooperación necesaria en las situaciones de desastres y cuando la delincuencia rebasa la capacidad de la Policía, como ahora que el impuesto de guerra es mayor que los ingresos fiscales, y el narcotráfico viola los espacios terrestres, aéreos y marítimos.
Es cívico que las FF AA beneficien al pueblo, fomenten el patriotismo y con otras acciones, siempre y cuando no disminuyan su condición de apresto, sobre todo cuando los vecinos se rearman, renuevan su Fuerza Aérea, agreden impunemente a nuestros pescadores mientras se burlan y miran de menos a los miembros de la Fuerza Naval Hondureña, y pretenden cerrarnos la salida al océano Pacífico.
La Policía Nacional es el cuerpo civil encargado de la Seguridad Pública, por espíritu de servicio deben proteger la persona humana y su patrimonio, por la prevención e investigación adecuada del delito; es parte del sistema de justicia penal encargada de la captura de todos los delincuentes, incluso los prófugos, para su debido juzgamiento. La vigilancia de los privados de la libertad, sentenciados y convictos, es función de otro cuerpo debidamente entrenado para ello.
Reclamar con claridad, respeto y transparencia que cada institución se ajuste a cumplir sus funciones, no nos hace parte de ningún mundo oscuro, como lo dijo con malicia el Presidente de la República, en su muy pensado discurso en el traspaso de mando de la Comandancia del Estado Mayor Conjunto, este 21 de diciembre, del que citamos “Hay personajes del mundo oscuro que no por ideología, sino por su vinculación con el crimen, no quieren que las Fuerzas Armadas de Honduras sigan haciendo su rol de servicio a la ciudadanía”.
Ahora que se juzga a los corruptos y criminales de todas las nacionalidades en todas partes, estamos tranquilos los que no somos corruptos, ni por ideología tenemos vinculación con criminales; no tengo amigos ni correligionarios de esa condición; ni me he lucrado en las casetas de peaje de la administración pública hondureña. Ergo, no somos extraditables. Ojalá el Sr. Presidente de la República y otros políticos no lo sean cuando les toque demostrarlo. Para Unamuno, el peor analfabeto es el que sabiendo leer, no lee y sabiendo escribir, no escribe; no menciona a analfabetos que a propósito leen mal o no escriben sus discursos.
Quien dice la verdad es respetuoso y merece respeto.
La justicia debe permitir a quienes nos acusan ser de ese mundo oscuro, exigir al presidente JOH las pruebas de su calumnia y difamacións de JOH
RAMÓN CUSTODIO
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