Maccih, a combatir la corrupción

Maccih, a combatir la corrupción

Editorial El Heraldo

Llegó el día. La Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih) comienza hoy su lucha contra uno de los peores, si no el peor, flagelo que aqueja a nuestro país y las expectativas en la sociedad son tan grandes como el reto que tienen por delante.

A partir de su presentación oficial este lunes, la Maccih comenzará de inmediato una gesta que, ya lo hemos dicho antes, es histórica porque la raíz de muchos males que aquejan a nuestro país es la corrupción y la impunidad es el abono que la ha fortalecido hasta alcanzar niveles monstruosos.

Si bien hay escepticismo en algunos, que ven a la Maccih amarrada a un gobierno que ejercerá como juez y parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) contará con importantes facultades de operatividad, semejante a la que se le dio a la Cicig en Guatemala y que obligó a la renuncia del entonces presidente Otto Pérez por su vinculación con el caso de defraudación aduanera conocido como “La Línea”.

Si a ese nivel llegó la acción de la comisión internacional solicitada a las Naciones Unidas, no esperamos menos de la misión que acompañará la OEA.

Y el gobierno, que en dos años de gestión ha emprendido también importantes esfuerzos en la lucha contra la corrupción, es el primer llamado a brindar todo su apoyo a la misión internacional que funcionará por los próximos cuatro años.

La población hondureña ha puesto su fe en que esta misión internacional no solo vendrá a llevar los casos de corrupción ante los tribunales, en los que se espera una acción penal correcta, llevando a los delincuentes a prisión, sino que lo más importante que puede dejar al país es una institucionalidad fortalecida.

Rendición de cuentas, reformas al sistema de justicia y en política-electoral, investigación de casos y redes de corrupción, incluyendo aquellos en y desde el sector privado, establecimiento de políticas preventivas anticorrupción y la depuración de la Policía Nacional son algunas de las funciones que tendrá la Maccih en un país hastiado de tanta corrupción y hambriento de una verdadera justicia.