“Sabios”, pillos y vividores

“Sabios”, pillos y vividores

OCTAVIO CARVAJAL

Llevamos meses analizando, interpretando opiniones de diversos exfuncionarios, apreciados o autodenominados expertos en temas urgentes como seguridad, desempleo, macroeconomía y no son más que un grupillo de solapados, vividores que siendo burócratas fueron abusivos, cómplices y complacientes de gobiernos corruptos.

Sorprende que en medio de incontables problemas nacionales broten hombres y mujeres de confianza de regímenes pasados hablando, a lo brujo, de cómo resolver los aprietos que ellos (as) nunca remediaron mientras hurgaban las finanzas, la política monetaria, la seguridad ciudadana, entre un sinnúmero de apremios locales.

Los hondureños fuimos inmolados en la tétrica gestión del distinguido Porfirio Lobo Sosa. Nos metió doce ajustes fiscales para resarcir la debacle económica, inseguridad y desempleo que nos dejaron sus amigos Manuel Zelaya Rosales y Roberto Micheletti Baín. “Pepe”, campeón indiscutible en paquetazos, vive tranquilo y calladito. ¡Grosero!

Durante las jefaturas de “Mel” y Micheletti quedó una deuda flotante de casi 30 mil millones de lempiras, según un informe del Foro Social para la Deuda Externa en Honduras (Fosdeh). El país fue saqueado, incendiado, polarizado. Lo entregaron a narcotraficantes, nos sumieron en más miseria, delincuencia y falta de empleos. ¿Mentimos?

Con décadas de estafas, pactos sucios, recién gritó una técnica de tutelas anteriores chocando presupuestos inflados. Olvidó, a lo irónico, que hace 20 años estuvo presa por abusiva. Burócrata empedernida. Por consentir antojos a su jefe nos dejaron en ruina, recetándonos una taza de café. Así gozaban jugosos sueldos por lamerle las botas a su potrillo. No se crean tan vivos que no somos tontos.

No poseen pelaje moral. Son más de lo mismo. Mansos con hambre y altivos robando. También zumba un exfuncionario que, siendo presidente del Banco Central de Honduras (BCH), dejó una inflación superior al 12 por ciento. Bien les haría quedarse con el pico cerrado pues en las mieles del poder se atarantan y se desbocan. Honduras es una cuartería.