El bosque

Por: José Segovia Ynestroza  

Bien dice el ingeniero José Galdámez de la SERNA: ya en 1900 teníamos una política definida de cómo manejar el bosque responsabilizando de su manejo, protección, reforestación y cuido a la industria de la madera y grupos organizados dentro de áreas tributarias definidas por el Estado (en ese tiempo por Cohdefor), con planes de manejo técnicamente ejecutados y aprobados; acabábamos de pasar el ataque cíclico del gorgojo en 1986-87, Canadá, EU y México habían sufrido una dura experiencia, experiencia que sirvió para definir su forma de control y que nosotros usamos, formas de control que aún son vigentes pero que como dice Galdámez con la política actual de responsabilidad tan compartida resulta imposible aplicar como ha quedado más que ampliamente comprobado ante este nuevo ataque del gorgojo.

Las áreas tributarias eran extensiones de bosque mapeadas y cuya cobertura se definía de acuerdo a la capacidad instalada de la industria o de los grupos campesinos organizados, el industrial negociaba con el propietario o con el Estado su explotación, de esta manera también se controlaban y asignaban los volúmenes de corte anual previa aprobación de la junta directica presidida por el señor presidente de la República.

Hay quienes por ignorancia o por no investigar o sencillamente por opinar sobre lo que desconocen acusan de que no hemos tenido una política forestal pero si la tuvimos y la dejó definida el ingeniero José Azcona durante su mandato con tres componentes básicos, propuesta planteada por uno de los grupos forestales de mayor experiencia en el país y que incluía: Plan de manejo (que aún se exige), venta del recurso en pie con aprovechamiento total del árbol que se abandonó y lo más importante el área tributaria, en cuyo sector tenía la industria o los grupos organizados responsabilidad total de su manejo, cuido, reforestación control de incendios y sobre todo protección, casualmente el componente que exigía entre otros el control temprano del gorgojo pero en el gobierno de Rafael Leonardo Callejas con Pepe Lobo de gerente de Cohdefor propició el desorden y el abandono de la política aprobada aduciendo como nos lo dijo personalmente que cada quien tenía su forma de gobernar, eso después de que se le informara de la política que estábamos desarrollando y que él y Callejas la aceptaran como apropiada; posteriormente el gobierno de Carlos Roberto Reina (QDDG), inducido por Sandoval Corea que quería transformar a la Cohdefor en ministerio replanteó en el uso del bosque los conceptos de reforma agraria en los que ya había fracasado en tiempos de López Orellana, otro que solo Dios sabe dónde lo tiene y terminó permitiendo el uso de más de 10 mil motosierras porque según él todos los campesinos tenían derecho al bosque, y comenzó la fiesta, fiesta que aprobaron los madereros que no solo se beneficiaban del desorden creado por Corea, comprando madera sin control sino que quedaban eximidos de la responsabilidad a que se venían obligados al sujetarse a las áreas tributarias y al seguimiento de un plan de manejo y cuando Mel trató de enfrentar el desorden del que también fue partícipe en su momento, nos decía que en realidad la mejor política que se había definido para el manejo del bosque era la dejada por el ingeniero

Azcona.

Señor Presidente JOH que no lo engañen como siempre, exija una revisión de lo aquí expuesto y apoye al ingeniero José Galdámez, hay forestales capaces. En el desorden actual no hay manera de controlar el gorgojo ni de aprovechar el bosque y como ya lo proponíamos cuando nos referimos a la madera dañada oriente la construcción de casas, pupitres etc. etc., que hagan quemas controladas, el bosque se regenera solo como sucedió en la Mosquitia.