El Estado y la extorsión
El Estado y la extorsión
MIGDONIA AYESTAS
Preguntémonos ¿A dónde va a parar el dinero producto de las extorsiones? Para explicar -al menos en parte- la situación de violencia y criminalidad que impera, en donde día con día la población vive en zozobra y miedo de salir a la calle y ser objeto de un acto criminal o ser testigo presencial de una escena de crimen donde pierde la vida un trabajador del transporte público, un miembro de la diversidad sexual, un docente, o a un comerciante le quitan la vida por no ceder a las amenazas para que les pague una especie de derecho a poder seguir operando; da miedo, pero es el miedo que en este momento tienen los pequeños negocios de Loarque y otros barrios, los que van a abordar una unidad de trasporte o los que las conducen, que no saben si van a regresar a sus casas.
Por favor, explíquenos ¿a qué llaman salvaguardar la integridad territorial? Si la conflictividad se está librando adentro ¿qué clima de inversión tenemos? Cuando los negocios de los hondureños que luchan se están cerrando, ¿qué libre empresa y de mercados abiertos? Cuando se tiene que presupuestar los impuestos de guerra -vean y no estamos en guerra- para poder tener en funcionando un pequeño negocio; y otras cosas que discursan, cuando la gente que vive en carne propia sabe la agonía de replantearse una nueva estrategia de “sobrevivencia”.
Pero la pregunta es: ¿qué hacen con ese dinero ilícito? remontémonos al origen del lavado de dinero, que en los años 20, cuando las mafias norteamericanas querían esconder la procedencia ilícita del dinero producto de las actividades criminales y en este caso de las extorsiones y para ello, crearon el negocio de las lavanderías, bonito negocio ¡lavan el dinero! Por supuesto que no, era una forma de pasarlo de lo ilegal a lo legal y ¿en dónde lo guardaban? en caletas estilo los narcotraficantes colombianos, en baúl o tinajas estilo nuestros abuelos cuando no había bancos en Honduras o no confiaban en ellos. ¿Quiénes son los que se benefician de este ilícito? Bueno, la respuesta la esperamos de la ATIC y de la DPI.
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