El analfabetismo y las marionetas de la UNAH

El analfabetismo y las marionetas de la UNAH

Por Boris Zelaya Rubí


“En la actualidad, la educación es probablemente la función más importante de los gobiernos. Las leyes de asistencia obligatoria a la escuela y los grandes gastos que se llevan a cabo a favor de la educación, demuestran su importancia para nuestra sociedad democrática. Es dudoso que algún niño pueda aspirar razonablemente a tener éxito en la vida, si se le niega la oportunidad de la educación. No hay analfabetos entre los ricos o los acomodados”.

La oferta de empleo es limitada, la empresa privada busca para los que serán sus empleados la excelencia académica, el gobierno satura sus dependencias, dándoles ocupación a los activistas políticos y apenas les pide como requisito leer y escribir o haber cursado el primer y segundo grado de educación primaria. En muchos casos su labor consiste en llegan a marcar sus tarjetas de control a la hora de inicio y al final de sus labores. De estos últimos están llenas las planillas de pago, muchos de ellos son asignados a un escritorio, que permanece vacío la mayor parte del tiempo. En algunos casos su única función es la de recibir y trasladar documentos de un escritorio a otro, operación que puede tardar días o semanas, haciendo que transite normalmente previo, algún “regalito” ¡maldita burocracia! Cuando se inician las reestructuraciones y reducciones de personal, se les pagan sus derechos y ya en la proximidad de las elecciones primarias vuelven a tener oportunidad de “trabajo” y son utilizados en arengar la gente de barrios y municipios a favor de algún aprendiz de político que tiene la suerte que lo integren en las listas de diputados o regidores, para luego pasar a disfrutar las mieles del poder consiguiéndoles empleos a los fieles activistas, que los dieron a conocer para obtener votos.

Los profesionales egresados de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, que aspiran a un empleo en la empresa privada, les exigen como requisito la hoja de antecedentes penales y son sometidos a varios exámenes. Si han cometido el delito de sedición, no serán sujetos de las otras pruebas y dependiendo la naturaleza del puesto también los investigan en su vecindario. Por lo general la oportunidad se la dan a los que tienen excelencia académica (a los de promedio de 60% ni siquiera los toman en cuenta). No es de extrañar que terminen pidiendo trabajo de lo que sea… pero tienen que poseer motocicleta. Los que luchan por pasar sus clases con calificaciones bajas cometen suicidio laboral.

En Honduras, los estudios primarios, secundarios y universitarios son gratuitos. Los alumnos cursando los últimos años de educación media y los estudios superiores, siempre han sido utilizados por los partidos tradicionales, con frentes estudiantiles llamados FRU y FUUD quienes han servido de activistas políticos, protestando de acuerdo a los señalamientos de los que estaban en contacto con las cúpulas de los partidos. Ahora siguen con la misma tónica, solamente que la izquierda ha variado sus estrategias y tratan de hacerla, dañando la propiedad pública y privada, lo que ocasiona enfrentamientos violentos con los guardianes del orden.

Los jóvenes estudiantes se convierten en marionetas de los dirigentes (algunos pareciera que son miembros de mara pagados) pierden su tiempo o hacen que lo pierdan sus compañeros, que sí están interesados en lograr una carrera universitaria, respondiendo al esfuerzo de sus padres (que los envían de todos los confines del país) o al de ellos mismos porque algunos, trabajan y estudian. Los programas del Estado en el sentido de atraer la inversión externa para generar empleo son un buen comienzo y también lo es la ayuda a muchas personas para que inicien sus negocios y que tengan, a pesar de su analfabetismo, la oportunidad de enviar sus hijos a la escuela sin que sean o representen una fuerza de trabajo necesaria para el sostén de la familia.

Solo el día en que todos nos involucremos en eliminar la pobreza será posible tener un país alfabetizado, capaz de vivir con dignidad, con equidad y democracia. ¡Fuera! los que utilizan o promueven las peticiones violentas de los estudiantes para salir en noticias y seguir “ganando puntos” para sus causas políticas. Van a morir en su misión imposible de cambiar nuestro sistema de gobierno.
De rodillas solo para orar a Dios.

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