Esos indeseables primeros lugares

Esos indeseables primeros lugares

PABLO CARÍAS

Cuando estamos frente a un cuadro o mapa social buscando conocer la situación de Honduras en relación con los indicadores sociales que establecen los organismos internacionales, nos podemos orientar en su lectura leyendo el nombre del país o revisar los datos estadísticos que aparecen; entre los datos más negativos, ahí está Honduras.

Triste realidad con la cual hemos tenido que convivir por décadas y que sirvió para que nuestro escritor Rafael Heliodoro Valle, inspirado en sentimientos de dolor por la trágica historia vivida por la patria, pronunciara: “La Historia de Honduras puede escribirse en una lágrima”.

Lo último que ha dado a conocer el Banco Mundial es el estudio hecho sobre las condiciones de desigualdad en el mundo; según los datos proporcionados por este organismo internacional, Honduras ocupa el primer lugar en América Latina en el ranking de desigualdad.

Los especialistas nos advierten que no es lo mismo pobreza que desigualdad, la pobreza se vincula con el ingreso medio de una sociedad. Por eso se puede tener países pobres muy desiguales, que es el caso de Honduras, pero también países con ingresos medios o de altos ingresos, como Brasil o Estados Unidos, con altos niveles de desigualdad.

Según los datos del censo del año 2012, la pobreza para el 2014 se calculaba en 68.2% y la pobreza extrema en 44.6%, siendo mayor la pobreza rural que la urbana.

La mala distribución de la riqueza se traduce en una inequitativa distribución de los servicios públicos, en este caso, cuando hablamos de educación, los datos son deprimentes. Tenemos, según la información gubernamental, una tasa de analfabetismo de 17.5%, con un promedio de escolaridad que apenas llega a un séptimo grado, un 12% de la población en edad escolar sin cobertura, un sistema educativo con deprimentes condiciones físicas y pedagógicas, carencia de bibliotecas, laboratorios y una deficiente formación profesional en el personal docente. Lo anterior hace que, según consideraciones de expertos en materia educativa, Honduras sea el país que tiene el segundo peor rendimiento en educación (El Heraldo/07/04/2014).

Así las cosas, Honduras es el peor país para envejecer, según estudio anual de la ONG Help Age International, en el ranking 2015 ubica al país en el puesto 82 en una lista de 96 países, siendo los primeros lugares los mejores para vivir la vejez y los últimos, los peores.

Honduras es el país más peligroso del mundo para ser ambientalista, de acuerdo al informe de Global Witness. Según los datos proporcionados por esta organización humanitaria, en el país fueron asesinados 101 ecologistas entre 2010 y 2014. La ambientalista Bertha Cáceres se suma a esa lista de muerte en defensa de los recursos naturales.

De los fallecidos, el 40% de las víctimas eran indígenas y las principales causas de su muerte fueron vinculadas a la lucha contra la industria hidroeléctrica, la minería y la agroindustria, según Global Witness.

Lo maravilloso de Honduras es que, a pesar de que muchos de sus hijos y extranjeros han actuado como para destruirla, todavía se impone con rasgos de belleza y exuberancia.