El sueño del ferrocarril, se quedó sueño

El sueño del ferrocarril, se quedó sueño

la Tribuna

Por Alex Talbott

alextalbottr@gmail.com
http://alextalbott.wordpress.com

El sueño del ferrocarril, artículo editorial de La Tribuna del 4 de septiembre recién pasado describe la historia zigzagueante del ferrocarril mundial y el cual trajo a mi recuerdo los ferrocarriles que sirvieron con el banano al desarrollo de la costa norte, los cuales hoy día, estarían operando y abonando al desarrollo del país.

Pero los amigos partidarios del presidente Callejas lo engancharon a descontinuar el uso de los ferrocarriles para dar paso al transporte terrestre.

El ferrocarril me hizo recordar cuando niño pasaba frente a las casas donde residían los empleados directivos del FCN bajo la administración de La Tela por El Cocal, La Laguna en Puerto Cortés. Todos los días cuando iniciaba su recorrido hacia el sur de San Pedro Sula su tren de pasajeros y carga pasando ida y vuelta por Baracoa, Bijao, Choloma, San Pedro, Villanueva hasta Potrerillos y regresaban por la misma ruta por la tarde, así mismo entraban y salían al puerto a deshoras los convoyes bananeros de La Tela, quienes después de descargar los guineos verdes derechos los metían al barco de la Gran Flota Blanca y se iban de vuelta a las fincas a traer más guineos.

En varios de mis artículos he venido contándoles a poquitos sobre la visita del presidente de una ferroviaria que opera un ferrocarril el sur-este de Canadá, el este de los USA y México. Hoy voy a contarles un poco más sobre ese señor: A principios del 2009 voló desde su centro de operación en Kansas City en el estado de Missouri en el centro de los USA a Honduras, por invitación de amigos sampedranos a ver las condiciones de nuestro FCN, pero su regreso marcó una visible desilusión por no haber encontrado nada de interés para darle seguimiento a una oferta de compra. Para quizás hacer lo mismo que había hecho en Panamá años atrás.

Este mismo señor, después que USA traspasó el Canal a Panamá, negoció las chatarras del ferrocarril de Panamá, las remozó y hoy día el ferrocarril le saca las castañas del fuego al Canal de Panamá, transportando ida y vuelta contenedores para reembarque por los puertos de Balboa y Colón, exitosamente.

Hace 4 años vengo dando pistas a mis lectores del peligro que corre Cortés de no poder convertirse en lo que la Visión de País pretendía para ellos, porque estaba en proceso de construcción bajo concesión por 33 años un súper puerto en el Atlántico de Costa Rica para hacer lo mismo que hace Cortés, cuyo costo anunciado para su construcción es de 1 billón de dólares de los USA y será operado cuando esté listo por la APM división de puertos de sus dueños la naviera Maersk, tendrá 14 grúas de carga y descarga, me imagino Paceco fijas y Gotwall movibles para servir a los barcos Panamax y Postpanamax, un puerto moderno diseñado por la naviera más grande del mundo, y con la cual Cortés no puede competir. Siempre he creído que “los puertos no nacen se hacen”.

Creo que si la terminal y el ferrocarril hubiesen sido incorporados en el 2010 o despuesito, la Portuaria con una administración honesta, un operadora nacional que estaba entrenada, con el equipo adecuado y una aduana dinámica, la brecha competitiva no hubiese pasado, paso por el pésimo servicio que le dieron a las navieras y el abuso de las tarifas y punto.

La ENP desde su creación ha sido una fuente de saqueo del gobierno de turno, sus gobernantes y amigos, si hubieran equipado a la portuaria para ofrecer un mejor servicio con costos razonables la naviera Maersk no se hubiera motivado a la construcción de un puerto en otro país centroamericano.

Todos y el presente gobierno han sido los culpables de este tremendo cagadal portuario que se le avecina a Cortés.

Seño Presidente, trate de ponerle atención a Cortés porque estará en problemas cuando entre a operar Moin y no esté solucionado el problema operacional del puerto de La Unión, debido a que el Canal Seco forma parte de la interconexión de Puerto Cortés (en el Atlántico) con la Unión (en el Pacífico), hay poco tiempo para hacer lo bastante que se necesita para ayudar a Cortés, su gente en la ENP no tiene experiencia de cómo resolver el futuro problema de desabasto de barcos ocasionados por Moin. Tampoco tienen la representación gubernamental para buscar la difícil solución del puerto de La Unión, para que al estar listo el Canal Seco, se pueda incorporar a la interconexión portuaria.