Tiembla la oposición
Tiembla la oposición
Por Boris Zelaya Rubí
“El estado psicológico de los adversarios del Partido Nacional es de justificado nerviosismo. El entusiasmo y el interés que ha despertado el futuro triunfo del nacionalismo en las masas populares son inusitados. Pocos líderes han hecho vibrar de fervor cívico al pueblo hondureño, como lo está haciendo aquel cuyo lema es “trabajar, trabajar” y “caiga quien caiga”.
Sin necesidad de haber consultado por medio de la “ouija” a Nostradamus, la santera o al famoso honordum, por los estertores de moribundos, se sabe que algunos pretendientes a la máxima investidura ciudadana del país, están tirando manotadas de ahogado, al presentir la inminente derrota. El capricho de algunos dueños de partidos políticos, los hace fracasar en el intento de organizar un frente común de oposición contra el mandatario, al que los nacionalistas de toda Honduras están pidiendo que continúe en el poder.
Los partidos recién salidos del cascarón, cuyos dueños no permiten que les hagan sombra algunos integrantes con mayor experiencia, pareciera que después de la aplastante derrota que se les avecina, están dispuestos a llevarse sus “retoños” a la tumba política, por la abrumadora reprobación de los compatriotas. Lo contrario sucede con el otrora gran Partido Liberal, donde han surgido infinidad de aspirantes a candidatos a la Presidencia de la República, en un pleito generacional entre aquellos que jamás abandonan sus sueños de poder y los jóvenes.
En palabras huecas de un inestable político, manifiesta que hay que buscar un candidato de la oposición, cuyos méritos suficientes es que sea “bueno”, ¿en qué? ¿O será que quiso decir manejable? pero nosotros los azules les recomendamos calma, deben tener esperanzas, es lo último que se pierde, todavía pueden esperar unos años más, tienen el ejemplo con el recién electo presidente del Perú, Pedro Pablo Kuczynski que cuenta con setenta y siete años de edad.
En América del Sur los dirigentes tradicionales han sido rechazados, la población entera ha estado en contra de las argollas partidarias que le niegan la oportunidad a nuevos dirigentes que tienen como principal objetivo servirle a la patria, como lo están haciendo los que integran el actual gabinete de gobierno de nuestro país.
Sería demasiado extenso detallar las obras realizadas por este gobierno, desde la depuración de los corruptos y el combate al crimen organizado hasta la construcción de parques de recreo infantil, todo esto con profesionales hondureños y asesorías de otros países cuyo principal objetivo es que logremos la paz y el progreso permanente.
La oposición como es su misión, trata permanentemente de desprestigiar al gobierno, intentando alianzas increíbles, demostrando que sus principios partidarios no son respetados, unidos conservadores con izquierdistas y lo que es peor y decepcionante es el encadenamiento de los que pregonan la honestidad con grupos de dudosa conducta, mientras manejaron las arcas nacionales, rindiéndole culto al dinero sin importar cómo se haya obtenido, demostrando una vez más que ¡le han mentido a sus seguidores!
Están haciendo llamados para que la oposición se manifieste, contra la continuidad del nacionalismo en el poder con el actual Presidente a la cabeza, de quien nadie puede negar, que está realizando una buena gestión que los “revolucionarios de cafetín” tratan de empañar, están desesperados gestando enfrentamientos con brigadas populares “los tira piedras, raya paredes y quiebra vidrios”, demostrando las únicas lecciones aprendidas como tácticas revolucionaras de izquierda. Ojalá que no se trate de provocar riñas tumultuarias para luego hacerse las víctimas y continuar manchando el nombre de la patria en el exterior, y evitar ir a elecciones, pues ya se consideran derrotados. Pensarán que con ese tipo de acciones, van a infundir temor a los que ya decidieron por quién votar.
De rodillas solo para orar a Dios.
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