Mariguana sí, carne no

Por: Francisco Zepeda Andino
Cnel. ® FAH

Ahora resulta que comer carne roja procesada es  un cancerígeno y que la mariguana es medicinal. Si repetimos las cuatro palabras del título unas cinco veces podemos crear un slogan popular para nuestras manifestaciones políticas.

La experiencia nos ha demostrado que cada cierto tiempo, algún laboratorio o grupo de “expertos” nos advierten de x producto natural o elaborado, tiene tales o cuales efectos dañinos o produce determinadas enfermedades. El café, los edulcorantes, las bebidas gaseosas, el tabaco y otros más, en algún momento han sido señalados como peligrosos para el cuerpo humano. Y si bien está probado que el tabaco y el alcohol pueden conducir al cáncer de pulmón, garganta, enfisema, cirrosis hepática y demás, hay algunas de esas predicciones que todavía no está definitivamente claro cómo nos afectan.

En una ocasión leía, en referencia a los edulcorantes o sustitutos del azúcar, que para tener resultados negativos en nuestro sistema, había que consumir unas 200 bolsitas diarias del producto.  Por años se ha argumentado a favor o en contra sobre el uso de la sacarina, aspartamo y la de origen herbal, stevia. Sin embargo, no hay una prueba rotunda de los efectos malignos de los  productos. A contrario, varios sirven para el control de enfermedades como la diabetes, evitar el excesivo consumo de azúcar refinada, etc.

Calificar el uso de la mariguana como delito, ha conducido a buscar la despenalización de la misma. Dentro de ese proceso, surgieron los que proclamaban que la mariguana tiene dotes casi mágicas porque es, según ellos,   algo natural que cura o ayuda para la migraña, los dolores de artritis, reumatismo o esclerosis múltiple, el glaucoma, ayuda a los pacientes de SIDA a disminuir el dolor, la náusea y aumentar el apetito,  sirve para enfermedades de la piel,  ayuda a los que sufren de enfisema a respirar mejor y aquí cabe la pregunta, si esa enfermedad fue producida por fumar, ¿qué sucede al fumar mariguana?

En la actualidad hay 11 países que han aprobado el uso de mariguana “con fines terapéuticos”: Austria, Bélgica, Canadá, Finlandia, Israel, Holanda, España, Inglaterra, República Checa, Uruguay (la primera nación latinoamericana) y en Estados Unidos de América, 23 estados de los 50, permiten su uso medicinal y 2, el uso recreativo (Washington y Colorado).

Los que vivimos años como los 60s y 70s,  (La Generación de los Hijos de las Flores, The Flower Children Generation), conocimos la iniciativa del doctor Timothy Francis Leary, profesor de Psicología en la Universidad de Harvard,  donde llevó a cabo experimentos y dictó cátedra sobre los beneficios de la droga psicodélica alucinante LSD (Dietilamida de ácido lisérgico), con efectos psicológicos, alucinaciones, pérdida de la noción de la realidad y más. En el ambiente de “rebelión antiestablecimiento” imperante en esa época, el doctor  Leary inclusive, dentro de su experimentación, llegó a sostener haber tenido “migración espacial”, “incremento de inteligencia” y “extensión de la longevidad”. El uso de LSD, así como hongos alucinantes, de alguna manera tuvieron sustento en lo que afirmaba un profesor de Harvard.

Después del revuelo original causado por el anuncio sobre como la carne procesada tenía condiciones de ser cancerígena, vinieron las explicaciones. Primero, la carne “en canal” no estaba sujeta a la afirmación y segundo, se tenía que consumir una cantidad significativa diaria de productos procesados como chorizos, chuletas, jamones, tocino y otros, para que la presencia del ingrediente que se usa en su preservación o mantenimiento del color, el nitrito de sodio, nos pudiera afectar.

De la alarmante afirmación inicial, se aclaró a  “grandes cantidades de carnes rojas”. Me imagino que de acuerdo a lo primero, nuestros amigos de naciones como Argentina, Uruguay o Chile, caen muertos, víctimas de cáncer de páncreas, de vejiga o de estómago, en cantidades mayores. Los extremos nunca son correctos y lo que hoy es bueno, mañana puede ser malo o viceversa.

Sabemos que el exceso en el consumo de muchos productos naturales o artificiales es dañino. El nivel de pobreza de la mayoría nacional no le permite el lujo de comer carnes en grandes porciones o con mucha frecuencia. El consumir gaseosas en exceso podría llegar a generar complicaciones derivadas de la ingesta excesiva de azúcar. El abuso de café, como estimulante que es, puede ser no apropiado para personas con restricciones de cafeína o de presión arterial y también para las paredes estomacales.

Personalmente consideramos que el fumar, en cualquier cantidad, es dañino para nuestro organismo pero, como todo, hay excepciones a la regla. Los mejores ejemplos están situados en los extremos del espectro ideológico. Winston Churchill, falleció a los 91 años y Fidel Castro, tiene en la actualidad 89 años.

¿Mariguana medicinal? Tengo mis dudas.