Cuenta del Milenio y corrupción

Cuenta del Milenio y corrupción

Editorial El Heraldo

De nuevo Honduras fue aplazada en su intento por acceder a la segunda fase de la Cuenta del Desafío del Milenio. Y de nuevo se repiten las mismas frases de consolación pronunciadas en los reveses anteriores y también las mismas excusas y justificaciones. Tampoco cambia la causa principal del tropiezo: la corrupción

La Cuenta del Desafío del Milenio fue creada en enero del 2004 y Honduras estuvo entre los primeros 17 países escogidos para recibir fondos de ayuda para luchar contra la pobreza por un total de 215 millones de dólares, cuya primera fase concluyó a finales de 2010. Entre sus objetivos está incrementar la productividad y habilidades de negocios de agricultores pequeños y medianos, así como reducir los costos de transporte entre centros de producción y mercados.

Aunque el comunicado de la embajada estadounidense sobre la mala noticia fue emitido el lunes, ya antes el embajador Nealon había anunciado en septiembre pasado que “hay una lista de compromisos que el país debe llenar y no estamos en condiciones en este momento de brindar más asistencia a través de la Cuenta del Milenio pero sí para la Alianza para la Prosperidad”, una propuesta del presidente Obama que deberá ser aprobada por el Congreso de mayoría republicana. “El desempeño de Honduras en los indicadores de gobernar justamente, inversión en el pueblo y libertad económica, como fueron medidos en los 20 indicadores del puntaje de este año, son similares al año anterior, y una vez más Honduras no logró aprobar el indicador de control de la corrupción, el cual es un criterio fundamental para aprobar esta evaluación y ser considerado elegible para desarrollar un compacto de la CDM”, dice el comunicado de la Embajada.

Mientras vecinos, como El Salvador, sí pasaron la prueba y son beneficiarios de estos fondos, Honduras apenas cuenta desde 2011 con un Programa Umbral de US$ 15.6 millones, que obviamente no ha cumplido su propósito que es ayudar al país a cumplir con todos los requerimientos para acceder a los fondos de la Cuenta del Milenio.

Tenemos, pues, otro motivo para combatir de verdad la corrupción