“Volvamos a casa”

“Volvamos a casa”

La historia se repite

Por Mario Mencía Gamero

Los gobiernos corruptos e incompetentes han causado muchísimo sufrimiento a los pueblos: “Profecía bíblica”.

En 1944 un ciudadano de origen catalán sin ninguna ilustración académica, llamado José Figueres Ferrer inició en Costa Rica una revolución que transformó su país. Con su lema “Volvamos al campo” inició a través de su partido Liberación, más los cambios estructurales que su nación necesitaba. Figueres sufrió cárcel, destierro y atropellos antes del triunfo de su esquema político liberacionista de Costa Rica. Hoy, Honduras está a punto de alcanzar metas insospechadas de avance cultural, político y social, poniendo su fe en el eslogan “Volvamos a casa”, hoy, un hombre distinto a Figueres, un ciudadano con auténtica formación universitaria, como el ingeniero Luis Zelaya, exrrector universitario y maestro por vocación.

El Partido Liberal virtualmente estaba desintegrado después del golpe de Estado del 2009. Cuando muchos militares se prestaron a defenestrar del poder a su mejor representativo en ese momento, aliándose para violar la Constitución, sacando a tiros de la Presidencia a José Manuel Zelaya Rosales, que sin querer defender su posición ideológica, se salió del marco del liberalismo tradicional, y que la historia juzgue tales actos y la personalidad del expresidente Zelaya, que hoy por hoy sigue enarbolando su ideario con el partido Libre en vigencia permanente, cuya militancia es considerable.

Hoy, la situación ha cambiado con la presencia encabezada por el ingeniero Luis Zelaya que, con inconmensurable energía y con su lema “Volvamos a casa”, atraerá a la milicia a los liberales.

El liberalismo social que nosotros desde más de 6 décadas veníamos pregonando es la postura actual del ingeniero Luis Zelaya, que las mentes arcaicas tradicionales del partido nunca pudieron sustentar, como instrumento moderno de la sociología política del Partido Liberal, y nunca han comprendido y entendido las nuevas ideas de un liberalismo remozado y el cambio de rumbo consecuente con la historia que exigen los nuevos tiempos y el pensamiento de las nuevas generaciones, por ello, enfatizamos que el lema “Volvamos a casa”, es la mejor proclama que un político renovado hace a su pueblo.

A los más de 400,000 liberales que nos apartamos momentáneamente del liberalismo anquilosado en la edad de piedra, desconociendo valores y repudiando la forma de pensar de medio millón de jóvenes de todas las categorías que hoy por hoy no se mueven al son de cancioncillas de barrios y preceptos anticuados del viejo liberalismo.

Esta generación de hombres y mujeres que nos apartamos decepcionados y los más de medio millón de jóvenes que hay que atraer al partido, enarbolando nuevas ideas, consecuentes con el momento de evolución que estamos experimentando y que nos lleva a esclarecer que el ingeniero Luis Zelaya comprende correctamente, alentando al liberalismo en su mensaje de “Volvamos a casa”, un pensamiento de conciliación y reflexión, como sustento ideológico y social que debemos pregonar y vivir sin reclamos ni rencores que perjudican el carácter y esencia de una doctrina social y política que en muchos momentos se vio escarnecida y frenada por los dirigentes del viejo liberalismo, que solo buscaba el poder por el poder mismo.

Nuestro candidato afirma, con su esencia de no mentirle a su pueblo, un ejemplo claro de una decisión moral en el cual debemos confiar.

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