EL CONFLICTO Y EL “GUARAGUAO”

EL CONFLICTO Y EL “GUARAGUAO”

SIGUEN suspendidas las actividades académicas en la máxima casa de estudios. Las autoridades han filtrado a la prensa la especie que son varias las carreras que peligran por la cancelación del período académico. Entre ellas están Química y Farmacia, Odontología, Facultad de Ciencias de la Salud, Facultad de Ingeniería y la Facultad de Ciencias Sociales. Se argumenta que debido a la pérdida de clases –va más de un mes de ese embrollo– “ya no da espacio para salvarles el período con todo y que se han quebrado la cabeza buscando un acomodo de tiempo”. Los diputados estaban atareados discutiendo otras vainas sin que les ajustara su cargado horario para revisar la iniciativa del grupo de estudiantes que propone un gobierno provisional ni la propuesta de la rectora para que se integre una comisión de arbitraje. Ambas posiciones son diametralmente opuestas, así que los legisladores tienen una ardua tarea buscando conciliarlas. Hasta donde da la imaginación, nadie a la fecha ha planteado una salida salomónica. Las figuras, incluyendo titulares de las instituciones que podrían servir de mediadores o de referentes, no ofrecen soluciones tampoco, aparte de repetir hasta el aburrimiento que se sienten a platicar.

En las últimas horas se supo de la suspensión definitiva de la universidad de 19 estudiantes, según las autoridades “porque cometieron los delitos de usurpación y privación injusta de libertad al realizar sus actos de protesta en el campus universitario”. Para tales efectos enviaron a cada uno de ellos una “Cédula de notificación” en la que supuestamente explican los motivos de la suspensión. La rectora volvió a insistir que “sectores ligados a la “cuarta urna” buscan desestabilizar al país, a través del Movimiento Estudiantil, que tiene en crisis a la Alma Máter”. Ofreció como evidencia que un conocido sacerdote jesuita fue quien “habría llevado al grupo musical “Los Guaraguao” a la Ciudad Universitaria, mientras arengaba al estudiantado. Amplió que ese concierto, promovido por el MEU, fue acuerpado por sindicatos, que ya se pronunciaron abiertamente, como la CGT, algunas ONG de derechos humanos, organizaciones LGTB e indígenas, todas afines al Partido Libertad y Refundación (Libre)”. “Nosotros estamos viendo –prosiguió la rectora– que esto se está vinculando al tema político partidario y entendemos que en la sesión del Congreso Nacional en el departamento de Lempira, hace dos semanas, el expresidente y coordinador de la “Alianza” estuvo expresando a unos diputados un tipo de opiniones, donde se visualiza que el interés es que se prolongue el conflicto en la Universidad hasta cerca de las elecciones del 26 de noviembre”.

“Es la misma estrategia del 2009 –que inició la crisis política– cuando intentaron instalar la cuarta urna y buscaban desestabilizar los escenarios políticos del país”. Sobre la propuesta presentada por el MEU que, entre otros puntos exigen un gobierno provisional que sustituya a las actuales autoridades, la rectora expresa: “Ellos quieren dirigir la Universidad, quieren un gobierno universitario donde ellos lo presidan y por lo tanto ya es una decisión que le corresponde al Legislativo”. Así que por las anteriores posturas no se puede colegir otra cosa que tanto la autoridad universitaria como los estudiantes en rebeldía dieron por agotada la instancia del diálogo y esperan que el Congreso Nacional sea el que resuelva conforme a las iniciativas planteadas por cada una de las partes en conflicto. Menuda tarea la que tienen los diputados. En época política armonizar el conflicto de la UNAH.

Comentarios

Entradas populares