Observadores electorales son chiste de mal gusto
Observadores electorales son chiste de mal gusto
Por Dr. Israel Romero Puerto
Juris Doctor (jurista internacional)
PhD – israel09r@yahoo.com
PhD – israel09r@yahoo.com
No es ninguna noticia relevante que hayan anunciado la presencia de más de 3,000 observadores para las elecciones primarias en Honduras, y a no dudarlo la cifra llegará a los 10,000 en las generales de noviembre. Sin embargo, el trasfondo merece ser analizado detenidamente.
En todas las elecciones, especialmente presidenciales, hay observadores llegados de otras latitudes incluyendo representantes de la ONU. En las pasadas votaciones de Estados Unidos hubo observadores internacionales. Pero ellos no descubrieron el “hackeo” ruso. (Para los que no aceptan que se diga la verdad: Putin, Asange y Trump, ya aceptaron públicamente que hubo “hackeo” en las elecciones gringas). En suma, los observadores no descubrieron nada, porque esos “mirandas” solo andan de turistas. El objetivo de quien los invita es legitimar cualquier ilegalidad que se cometa.
Honduras no es la excepción. No hay excepción en Cuba, Nicaragua, Venezuela, y todos los países del mundo entero. En Honduras, a los observadores les va bien. Los llevan a las Ruinas de Copán. También a las Islas de la Bahía, y hacen buceo (scuba diving) en los arrecifes de coral. Si no saben nadar, les enseñan. Los alojan en hoteles cinco estrellas, y el día de las elecciones les dan mucha cususa con baleadas.
Tampoco es una excepción a la regla que la Corte Suprema de Justicia dé luz verde a la inscripción como precandidato presidencial al Presidente.
Parece juego de palabras, pero no lo es. El Presidente actual quiere reelegirse sin que haya una ley que regule esa figura jurídicopolítica en Honduras.
Él comenzó a preparar el tamal desde inicios de su período actual y se adueñó del Congreso Nacional y de la Corte Suprema de Justicia. Puso de presidente de esta última una persona de reputación dudosa que la Embajada Americana ha cuestionado.
Aparte de los observadores y del chorizo de la Corte Suprema de Justicia, queremos analizar la inversión de Israel para repotenciar la Fuerzas Armadas de Honduras con $200 millones. Se habla de unos 20 aviones de combate remozados, buques de guerra destinados al combate del narcotráfico, además de armamento y equipo de inteligencia. Nos alegra por dos razones:
(1) El país fortalecerá sus medios de defensa, y
(2) el gobierno hondureño tendrá que rendir cuentas, y permitir ser observado desde adentro por el gobierno de Israel
Si usted cree que los israelitas van a poner doscientos millones de dólares en Honduras sin condiciones, despierte de ese sueño chueco. Con la reputación que tiene el gobierno de Honduras, y con las muestras de apoyo al terrorismo que el gobierno de marras ha dado, incluyendo en una visita a finales del 2015 en Jerusalén, donde proporcionó pasaportes hondureños a ciudadanos sirios -enemigos de Israel- para que ingresaran en territorio israelí, el gobierno judío estudió la mejor forma de echarle el guante a los catrachos, especialmente al Presidente actual.
No se afane, ambos gobiernos -Israel y Honduras- negarán la premisa. Los judíos porque son inteligentes. No quieren que se sepa el verdadero propósito de su “donativo”, y los hondureños porque no lo entienden. Su Presidente ha hecho toda clase de atrocidades, muchas de ellas publicadas por The New York Times, y porque cree que nunca caerá, y que “las puede” y nadie le echará el guante. “Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz” (Marcos 4:22; Lucas 11:33-36; 12:2-3; I Juan 1:5) Todo lo que digas y hagas en la oscuridad de un aposento, será proclamado desde las azoteas. (Mateo 10:27).
Coincidimos con Soraya Cálix -reputada como la “zarina” antidrogas de Honduras- en que los narcotraficantes crecieron en Honduras por falta de voluntad de las autoridades. El problema es que los narcos “eliminaron” esa voluntad con transfusiones de millones, a veces en dólares. Comprando la voluntad de las autoridades, la eliminaron, y aseguraron su impunidad. Hace más de un año, en Colón, una lancha rápida cargada de droga disparó contra un guardacostas de la Fuerza Naval Hondureña, hiriendo varios soldados hondureños y dañando el navío.
En el operativo fueron capturados varios de los que dispararon contra los soldados y la patrullera. Los delincuentes fueron liberados al día siguiente porque el fiscal de turno no presentó la querella criminal correspondiente aduciendo “falta de pruebas”. Los heridos, el guardacostas dañado, los delincuentes capturados, y los militares no son considerados prueba en juicio en la opinión del fiscal. La conclusión de este particular es que ese abogado se graduó en la Escuelita de la Risa de la Maestra Canuta. Pero que se hizo millonario, no hay duda.
En el 2016 fue capturado un verdadero zar de las drogas, Wilter Blanco. Los fiscales no presentaron la acusación criminal formal en el tribunal correspondiente, y fue liberado. Una fiscal fue descubierta como la informante de Blanco. Ella no fue ni siquiera separada de su cargo. Sigue siendo fiscal. ¿Cómo te quedó el ojo Sorayita?
En conclusión, si van a llevar observadores a las elecciones en Honduras, hay que tomar las precauciones del caso, porque el Presidente está siguiendo las 21 Lecciones de Fidel Castro para los Tiranitos Latinoamericanos. Uno de esos consejos es: “llenar las urnas con votos marcados a tu favor desde un día antes de las elecciones”. La recomendación nuestra: chequear todas las urnas por la mañana, antes de que se deposite el primer voto en cada una de ellas.
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