La ley de oferta y demanda

La ley de oferta y demanda

Por Mario E. Fumero

El mundo es un gran mercado en donde reina un sistema que se rige por leyes naturales, y que denominamos “oferta y demanda”. Esta ley regula los precios y el valor de las cosas. Su principio es sencillo, a más demanda y menor oferta, mayores precios, a más oferta y menos demanda menores precios. Esto crea el libre comercio, y la política económica se regula bajo esos parámetros en cuando al valor de las cosas. La competencia y el alto rendimiento industrial generan ofertas alentadoras que alientan el otro fenómeno del sistema capitalista como es “el consumismo” el cual nos lleva a comprar no por necesidad sino por placer, llegando al plano de convertirse en una enfermedad.

La riqueza de una nación está determinada por su capacidad productiva, lo que definimos como Producto Interno Bruto (PIB), o sea, cuanto más produce y más se autoabastece, más rica se hace. El importar el sobrante genera “divisas”. Pero ¿qué ocurre si en vez de producir bienes de insumo, los tiene que comprar (importar), o es más lo que importa que lo que exporta? Lógicamente el país se endeudará y la crisis financiera llevará a su moneda a la devaluación.

Inflación es igual a menos producción y más demanda. De forma tal que lo que determina el bienestar de una nación es la fuerza laboral existente y las riquezas naturales con que cuente ese país. La industrial es importante, pero jamás podrá compararse con los recursos productivos que generan la agricultura, pesca y ganadería. La obtención de materia prima para la industria enriquece a una nación, pero al carecer de industria que produzcan materia prima, somos víctima de los que ejercen el control de la misma. Pondré un ejemplo: producimos cítricos pero no podemos venderlo en alta escala, y los mismos se deterioran, eso se debe a que no contamos con una industria que procese esos cítricos en conservas como materia prima y ofrecerlos con un mayor tiempo de duración, porque al no tener industria que elabore el producto en conserva, lo vendemos a otro país que sí lo puede hacer y estos lo embasan y después no los envía de vuelta en conserva. De igual forma producimos café, pero no lo podemos procesar industrialmente, y se lo vendemos a un país rico, el cual lo embasa y nos los devuelven soluble.

Todo el mercado se rige por estos patrones, lo que da origen a transnacionales y organismo que regulan los precios de ciertos productos mundiales, tales como petróleo, hierro, café, azúcar, arroz, trigo etc. El hecho de que un producto suba o baje de precio está determinado por su demanda y producción. A menos cantidad y alta demanda, mayor precio.

Estamos a expensa de un deterioro climático y de una contaminación que afecta la producción mundial. Esto repercute en la escasez de alimentos, que a su vez genera el hambre. Es interesante el análisis de Apocalipsis 6:5-6 cuando establece una inflación y escasez que hace que los productos básicos para la alimentación alcancen precios escalofriantes. Esto se hace evidente en la escalada de precios que ha sufrido muchos productos básicos en los últimos 40 años, en donde los mismos han experimentado un aumento de hasta1000%.

Veamos solo un ejemplo en los Estados Unidos. En 1965 el galón de gasolina costaba 0.30 centavos de dólar, hoy sobrepasa los $3.00. En Honduras el galón costaba 0.96 centavos de lempira, hoy cuesta más de 70.00 lempiras. A su vez la moneda se ha devaluado de 2×1 a 23×1.

¿Qué es el dinero? Un medio simbólico que representa un esfuerzo y producción humana sobre cosas básicas para vivir y se usaba con un elemento intermedio que sirve para facilitar los intercambios. Si todos los hombres establecían el valor de sus productos sobre la base de la misma mercancía, el intercambio era mucho más simple. En tiempos antiguos cuando no existía el dinero se usaba el trueque1, el cual se practicó aún con la existencia del dinero.

Así que la moneda o el papel que tiene un valor, tiene que estar respaldado por lo que producimos, cuando se imprimen más billetes que recursos productivos aparece la devaluación y esta es un síntoma de que la economía del país va por mal camino.

El mayor peligro de la sociedad y los gobiernos para ir a la quiebra económica, y originar una crisis irreversible, es vivir a base del crédito fácil para resolver problemas, y no tratar de vivir de acuerdo a la realidad existente. Caemos en el crédito fácil cuando damos lugar a la ambición, que tristemente nos va a llevar a la desesperación. Es por ello que debemos seguir el consejo del apóstol Pablo para ser felices: “no debáis a nadie nada” Romanos 13:8.

1 – El trueque es el intercambio de bienes materiales o de servicios por otros objetos o servicios, y se diferencia de la compraventa habitual en que no intermedia el dinero como representante del valor en la transacción.

Comentarios

Entradas populares