“Quitémonos de la cabeza el ‘chip’ del título universitario”



“Quitémonos de la cabeza el ‘chip’ del título universitario”

Por Jubal Valerio Hernández

En reciente comparecencia del candidato a la Presidencia por el Partido Liberal de Honduras, ingeniero Luis Zelaya Medrano, con personas vinculadas a los quehaceres educativos, le escuché, entre otras cosas, la frase que sirve de título a este comentario.

A una pregunta formulada por el autor de estas líneas, sobre si es conveniente abrir las puertas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, a todo el que desee ingresar a la misma sin aprobar el examen de aptitud de rigor, como demagógicamente aparece en un plan de gobierno que anda circulando por ahí, el candidato liberal expuso su pensamiento de la siguiente forma: “‘Es que los padres de familia deben quitarse de la cabeza el ‘chip’ de que solo mediante la obtención de un título universitario, puede garantizarse el éxito de sus hijos en sus proyectos de vida y profesionales”.

Por nuestra parte agregamos: “‘Es que en ningún país del mundo, las instituciones educativas de nivel superior actuarían de manera tan irresponsable como se propone en el plan de gobierno al que hacemos referencia; ni aun en los países socialistas, como Cuba”.

A los jóvenes que no tienen aptitud ni vocación para desempeñarse en las carreras que desean cursar en la universidad, se les transfiere a una institución técnica, siempre de nivel superior, para que cursen estudios en los que sí poseen aquella vocación y aptitudes. Todo esto, en el entendido de que el aspirante ha pasado por el filtro previo de una carrera técnica cursada a nivel medio.

En el caso de los bachilleres en Ciencias y Humanidades, que muchos padres y estudiantes buscan cursar, porque solamente se necesitan dos años para aprobarlo y con lo cual obtienen, el pasaporte a la universidad, es necesario que se les suministre la orientación vocacional, que hace mucho se abandonó en nuestros centros de educación media, para que puedan escoger, con conocimiento de causa, hacia dónde derivar sus nuevos estudios.

Por las razones anteriormente expuestas, es que el ingeniero Zelaya Medrano propone se asuma la impostergable tarea de rediseñar el curriculum de estudios, a efecto de que se pueda educar a nuestros estudiantes para la vida. En otras palabras, formar jóvenes preparados científica y académicamente en las carreras para las que sí poseen aptitudes y vocación, con un fuerte componente curricular y extracurricular en valores cívicos, morales y ESPIRITUALES (así, con mayúsculas), haciendo un énfasis especial en la adopción de un claro espíritu de emprendedurismo.

La necesidad de reorientar al Instituto Nacional de Formación Profesional (INFOP), para convertirlo en un centro de educación técnico vocacional, bilingüe y altamente tecnologizado, es otra de las propuestas formuladas por el candidato liberal, que me parecen muy pertinentes y oportunas. De volverse una realidad, en el futuro cercano, se estaría logrando que los jóvenes que en dicha institución se educan, salgan al mercado laboral con la preparación que el desarrollo económico y social que el país reclama.

Estas son propuestas pertinentes y viables, no simples cantos de sirena.

Analicémoslas y estudiémoslas, antes de decidir a quién vamos a confiar la conducción del próximo gobierno. ¡La educación de calidad es la única solución para salir del atraso en que nos encontramos!

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