Desaciertos del pasado

11 NOV, 2017 - 12:02 AM

Por: Alex Talbott

Hace algún tiempo escribí contando haber escuchado al señor Presidente decir de Amapala, que el gobierno ya tenía el préstamo aprobado para hacer el estudio del Ferrocarril Interoceánico, noticia que me causó sorpresa porque el gobierno anterior había negociado otro estudio igual, eso me obligó a escribir en noviembre del 2015 “El enigma de un estudio”, contando lo que sabía de otro estudio, lo cual me imagino motivó al señor Presidente pedirle a uno de sus ministros ponerse en contacto conmigo y verificar la existencia de otro estudio ferroviario, a quien le facilité copia de la firma de un estudio para el Ferrocarril Interoceánico publicado en LA TRIBUNA el 18 de mayo del 2011, siendo garantes con su firma el señor presidente pasado, don Porfirio Lobo Sosa, el representante del consorcio inglés K. Group Inc., Salim Khaireddine. El comisionado presidencial de gestión de proyectos, Mauro Membreño presentó el proyecto diciendo que tomará un año hacer el estudio, tiempo que hace ratos pasó, sigo sin saber el final del estudio e intrigado con el riesgoso e inusual forma de pago para un proyecto tan costoso y la forma no convincente como lo negoció el comisionado presidencial de Gestión de Proyecto de Casa Presidencial. Porque solo conocemos una manera de pago, uno que cobra y otro que paga.

Hablemos un poco de la Portuaria. El proyecto de expansión y modernización de Puerto Cortés elaborado por la administración portuaria del señor Babún era bueno pero venía de un gobierno tumbado, solo había que pulirlo y listo, sugerí que el préstamo del Banco Mundial autorizado y no ejecutado, se renegociara y siempre se usara en la expansión y modernización de la Portuaria para agilizarla porque estaba lenta, eso ayudaría a Cortés una vez entrara a operar el puerto de Moin en Costa Rica. Dije que la United había traspasado el Puerto de Cortés al gobierno y que esta había formado una entidad portuaria para manejarla, y que el gerente recibía órdenes directas del Presidente de la República o de la Junta Directiva portuaria, presidida por el ministro de Finanzas y quien de acuerdo con el Presidente de la República autorizaba el traslado de fondos de la Portuaria a la Tesorería de la República, quien las usaba para balancear el presupuestos de la República, y no dejaban reservas para las necesidades operativas de la Portuaria, al llegar el momento de perder su velocidad operativa, nadie tenía dinero, ese momento llegó y la Portuaria siendo presidente don Pepe, necesitaba vitalizar las operaciones portuarias, frente a tal situación el grupo asesor del presidente le recomendó usar la Visión de País 2010-2038, y acomodarlo a lo que dice textualmente la página 110 artículo 2 de mantener a Puerto Cortés como el más importante puerto en el Atlántico de Centroamérica, usaron ese mortinato congresional para concesionar Cortés, pero COALIANZA hizo mal el mandado y tuvieron que mandar el expediente de concesión a secretividad, hasta aquí debo llegar.

Sigo con la Portuaria. La concesión Portuaria no era la solución para Cortés, era buena para unos, enredada para otros, las operaciones portuarias son complejas porque requiere conocimientos portuarios que necesitan saber sobre navieras y viceversa, la frutera tenía gente entrenada mayormente en el embarque de bananos y a la entrega del puerto al gobierno, Cortés se volvió un puerto manejado políticamente desde Tegucigalpa por los presidentes gobernantes, los ministros de Fomento y asesorados por neófitos amigos que nada sabían de navieras y puertos. Pero un puerto operado empresarialmente con maestría portuaria hubiese sido un puerto del país, operado por gente del país, entrenados sin costo por las navieras y sería un mineral acuático del país.

Otra negoción para ganar sería el Puerto Seco/Parque de Contenedores, en Villanueva con sus servicios aduaneros para manejar las importaciones y exportaciones portuarias y el ferrocarril salvarían a Cortés porque toda la carga transportada por la CA-4 de y para el occidente y la CA-5 de y para el sur y el Canal Seco “cuando opere” en ruta a la Portuaria entregarán y recogerán su carga en el Puerto Seco en Villanueva, la carga de y para Cortés serán trasladadas por ferrocarril. El corredor vial de la CA-4 CA-5 desde Villanueva a la Portuaria y viceversa, ayudaría a San Pedro, Choloma y Cortés a manejar su tráfico vehicular con más seguridad, reducirán su consumo de combustible, crearán fuentes de trabajo en Villanueva y sus alrededores, doblarían sus maquilas, los terrenos siguen allí esperando convertir a Villanueva en una ciudad modelo.

Buen día.