Imposible que alcaide no sea responsable

4 ABR, 2017 - 12:32 AM

Por: Dr. Israel Romero Puerto
juris doctor (jurista internacional), PhD – israel09r@yahoo.com

Trasladar 755 reos de alto riesgo no solo es un show mediático por la forma tan estrafalaria en que se efectuó, sino que es evidencia de corrupción, por mucho que el Presidente Hernández quiera opacar la impunidad reinante en el país. Esa noche aterrizó una narcoavioneta en el Villeda Morales. Nadie la paró.

Es sorprendente que sin haber una investigación, sin que un ente independiente rinda un reporte acerca del hallazgo de más de tres millones de lempiras en efectivo en el centro penal sampedrano, y un arsenal de armas de todo calibre, incluyendo fusiles de asalto y municiones, aparte de enorme cantidad de celulares y droga, el subdirector del Instituto Nacional Penitenciario ya libró de culpa al actual director del penal sampedrano. ¡Por ley el jefe es responsable!

La evidencia prueba que usar unos 4,000 policías, en una caravana de más de 300 vehículos, sí sorprendió al mundo entero, como dijo el Presidente Hernández, porque mostró a Honduras como un país populista. En un país civilizado, meten mil reos en buses, engrilletados a los asientos, con dos guardias en cada bus, y los patrulla un helicóptero artillado. Si otros criminales pretenden liberarlos, desde el helicóptero les meten un misil, los hacen pedazos, y listo.

El racional era que con esa movida se detendría la extorsión y las matanzas. Al día siguiente del monumental traslado de presos hasta El Pozo, en Santa Bárbara, los delincuentes asaltaron un bus en San Pedro, y mataron al motorista porque el propietario de la unidad falló en pagar la extorsión. En Choloma, mataron a cuatro a pocos pasos de una posta policial. En San Pedro aparecieron varios encostalados. En Tegucigalpa siguen apareciendo encostalados y decapitados, como una madre y su hija.

Demás está decir que el día del atentado en Londres, donde murieron cuatro personas y 29 resultaron heridas, mataron dos personas en el estacionamiento de los juzgados sampedranos, hasta donde los persiguieron los sicarios. Una abogada que viajaba con ellos se salvó porque logró meterse al edificio judicial. Una noche antes otra abogada empleada de la ENEE en el campamento de Cañaveral, Cortés, fue asesinada en su propia habitación. Al día siguiente del atentado en Londres, un empleado de ATIC fue asesinado en San Pedro Sula.

Como siempre, los encargados de investigar y procesar a los criminales, en todos los casos anteriores recitaron el estribillo que ya da vómito escuchar: “Vamos a investigar, y vamos a llegar hasta las últimas consecuencias, y cuando encontremos a los culpables los vamos a meter a la cárcel, para que se pudran allí”. No investigan.

La Scotland Yard nunca hace esas promesas estúpidas. Pero en el atentado frente al Parlamento de Westminster, inmediatamente acribillaron al responsable, investigaron el caso y al día siguiente publicaron que el terrorista asociado a ISIS actuó en conjunción con tres más, a quienes arrestaron.

El gobierno hondureño consiguió la aprobación de préstamos de parte del BID y del Banco Mundial, por casi mil millones de dólares. Obtener financiamiento de esas instituciones es bueno porque los intereses son bajos y el plazo para pagar es largo. Pero sacar pecho por la adquisición de una deuda es populismo porque el país tiene que pagar esa deuda billonaria, ya que con intereses pasa del billón de dólares. De nuevo, no es un regalo, es un préstamo que hay que pagar.

Hablando de reportes oficiales y de show político y populismo, el asesinato del periodista Igor Padilla de la televisora HCH ya quedó en el olvido, con un reporte falso de la fiscalía. Hasta el Presidente Hernández viajó a San Pedro para participar en la investigación, y “abrieron dos líneas de investigación”. En el reporte oficial consta que Padilla fue asesinado con armas AK-47. En el sitio del hecho, barrio Medina, no se encontraron casquillos de AK-47. En los edificios aledaños no hay agujeros de AK-47. El cuerpo de Padilla presentaba unos 30 agujeros que no son de AK-47. Casquillos, agujeros en paredes y en el cuerpo de Padilla son de municiones 7.62 x 39mm, 7.62 x 51mm y 5.56 x 45mm.

Preguntamos a un alto oficial de la Policía Nacional sin explicarle por qué: ¿Quién usa armas con esas municiones? Y la respuesta fue: “Solo la Policía Nacional usa fusiles de asalto con esas municiones”. Lo mismo dijo “Cachiro” en Nueva York. También es corrupción, encubrimiento e impunidad que la mujer que hizo la llamada final, fue liberada porque, “ella no tuvo nada que ver con el asesinato”.

Los fiscales hondureños solo escucharon que los “Cachiros” confesaron que mataron 78 personas, y se inventaron un viaje a Nueva York, supuestamente para investigar esa denuncia. Para su información, con los “Cachiros” nadie puede hablar porque son testigos protegidos. Sus parientes recibieron la ciudadanía americana y fueron reubicados a un sitio desconocido en Estados Unidos.

Si los fiscales catrachos quieren copia de los documentos en el expediente del caso de Fabio Lobo, que es donde “Cachiro” fue llevado como testigo del gobierno americano, basta mandar un empleado del consulado hondureño a la corte, y obtiene copias certificadas.

Nosotros opinamos que con la MACCIH metiendo sus narices en casos de la CSJ solo beneficia a los criminales por vicio de nulidad, el TSC sin conseguir una sola condena, y los fiscales dejando libre a criminales con la excusa de no haber pruebas, Honduras sigue siendo un país altamente corrupto.