¿El pueblo rehén de quien es?





¿El pueblo rehén de quien es?
En Honduras, ya es un hecho consuetudinario los paros de labores tanto en la administración descentralizada como descentralizada, con énfasis en las secretarías de educación y salud, las cuales se encuentran altamente politizadas, en menoscabo del perfil profesional, que hoy en día es secundario al perfil político y de acuerdo a la corriente dominante dentro del partido de turno.
En un tiempo, era notorio que los movimientos reinvicativos de los trabajadores, tomara como rehén al pueblo mas necesitado de los servicios públicos, pues casi siempre eran con fines de mejoras salariales y otro tipo de prebendas, que en su momento hacían de acuerdo a lo que se les ocurría a los trabajadores, por mucho tiempo creímos que esa conducta no era la adecuada para dirimir esos conflictos, pues a la larga siempre se terminaban con no represalias y muchas nuevas prebendas.
Durante ese lapso, tanto el pueblo enfermo como los estudiantes eran las víctimas propicias de estos movimientos, con la complicidad de las autoridades en no resolver a tiempo dichos conflictos y que al final terminaban cediendo, en otras ocasiones los rehenes eran el pueblo trabajador, que miraba como sus ingresos disminuían cada vez que ocurría una toma de un puente, una calle o la simple obstaculización del tránsito de vehículos con el consiguiente derroche de carburantes.
Pues bien, en los últimos movimientos de los trabajadores, se ha dado vuelta la tortilla, pues quien tiene de rehén a la población, es el mismísimo gobierno, ya que los trabajadores no están pidiendo nada nuevo, simplemente que el gobierno de turno cumpla los acuerdos firmados, leyes existentes y no estarle dando largas a la responsabilidad que tienen como administradores del estado.
Por lo tanto podemos concluir, que la actual administración ha actuado negligentemente y en detrimento de los trabajadores, al no cumplir sus compromisos y su renuencia a honrar las leyes, que ellos mismos elaboraron.
Ahora tratan de lavarse las manos acusando a los trabajadores cuando en realidad los únicos responsables son ellos mismos por violar las leyes, olvidándose que ellos no están por sobre las leyes, si no que están para cumplirlas y sin interpretaciones como actualmente pretender resolver los problemas por ellos mismos creados.
Señores del gobierno, sean más serios, no actúen mirando el costo político como acostumbran, sean más técnicos y pragmáticos, cuando les toque negociar, sepan decir no con argumentos técnicos y financieros, que los trabajadores entenderán las limitantes y aceptaran su argumento planteado.
No sigan manejando las instituciones del estado como agencias de colocación, pues esto es lo que les ha causado el enorme desfase financiero, que hoy por hoy, no tienen los recursos para cumplir sus compromisos laborales, no traten de culpar al trabajador por los yerros que ustedes cometen, pues los trabajadores simple y llanamente solo reclaman lo que por justicia les pertenece.
Dejen de tener de rehén al pueblo hondureño, no traten de engañarlo, pues el pueblo merece justicia y mucho más de sus gobernantes.

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