Honduras: país en harapos

Honduras: país en harapos

Desde hace muchos años, Honduras era un estado estable macro y micro económicamente, pero a partir de los gobiernos de fuerza el país empieza su espiral de endeudamiento en aras del progreso, progreso que solo se ha visto reflejado en los muchos nuevos potentados comerciantes e industriales ya públicamente reconocidos de donde surgió su fortuna: CONADI y CORFINO, instituciones que fueron groseramente manoseadas y saqueadas por los políticos, militares y otras personas allegadas a la cúpula de poder, desde ahí inicia la desgracia del pueblo hondureño, pues esos fondos fueron préstamos que el pueblo está pagando con creces, sumemos a ello la buena escuela que fueron los militares para la nueva casta política que asumió desgraciadamente el poder, pues estos no se quedaron cortos y también adquirieron préstamos que muchos de ellos solo fueron endosados y transferidos al exterior.

Lo que actualmente está reclamando el FMI como representante de los países prestatarios, es solamente que se honren las deudas, y ¿Quienes pagamos esas deudas? Pues las paga el pueblo hondureño con la excepción de los ricos y famosos, ya que estos tienen la habilidad adquirida genéticamente para eludir pagar como cualquier hondureño, pues ellos solo transfieren lo que les corresponde pagar por lo que usufructúan y han usufructuado al pobre pueblo hondureño.

Es por ello, que en la actualidad, Honduras es un país en harapos dado que la masa poblacional así se encuentra, sin esperanza de poder levantar cabeza, ya que la orientación que se tiene es hacia el consumismo y no hacia la producción, pues quienes tiene el capital saqueado de las arcas del estado, son incapaces de devolver parte de ese dinero invirtiéndolo en el país en actividades productivas.

Igual situación se da cuando ciertos personajes siniestros enquistados dentro de los políticos, su grueso de la fortuna proceden de  múltiples demandas al estado y con la venia del corrupto poder judicial ganaron, el regalo de los bienes del estado como ser las cementeras, que fueron dadas para una mejor administración, sólo ha servido para encarecer el cemento y para ello es necesario hacer uso de su poder político para levantar barreras arancelarias que les permita tener un mercado cautivo.

Podría seguir enumerando las causas de la pobreza extrema que estamos viviendo los hondureños, pero es necesario dar ideas de cómo revertir esta situación, pero que no sea a base de nuevos préstamos, pues está demostrado que estos no son la solución, al contrario, son una fuente para crear nuevos ricos.