El sacrificio del pueblo hondureño
El sacrificio que impone el gobierno
a al pueblo hondureño, gracias a las recomendaciones del Fondo Monetario
Internacional.
Las premisas que usan los economistas del fondo monetario
internacional según mi punto de vista, como lego en la materia son:
1.-La devaluación de la moneda nacional en este caso de
Honduras, incentiva las exportaciones, pues al disminuir el valor real de la
moneda en relación al patrón dólar/euro, las exportaciones bajan su precio en
el mercado internacional, por tanto los importadores de esos países, compraran
mas producto con el mismo dinero que
compran actualmente, por tanto hace mas apetitosas esa importaciones, pues
aumentan sus ganancias, en el caso de Honduras, el grueso de esas exportaciones
son productos agroindustriales, pues la capacidad productiva del país se
encuentra deprimida, y no tiene la capacidad de competir dada su poca calidad,
y en muchos de los casos solamente somos un país maquilador, por tanto el país
exportador aumenta el volumen de sus exportaciones pero el ingreso de divisas
es igual, pues los países importadores compran con menos dólares/euros los productos que importa.
Para ver si realmente se cumple estas predicciones de los
economistas del FMI, es necesario hacer un inventario de las empresas exportadoras
del país, si tienen la capacidad instalada para aumentar el volumen de sus
productos, si hay diversidad de productos en iguales o mejores condiciones de
calidad, si son productos esenciales o no, en fin hacer un diagnostico de la
capacidad industrial del país, que le permita captar mas divisas con el
mecanismo de la devaluación.
2.- Al devaluar la moneda, los exportadores como maquiladores
disminuyen sus costos de mano de obra, pues con menos dólares pagaran el
salario de sus trabajadores.
3.-Al devaluar la moneda, se encarecen las importaciones,
esto con el objetivo de desestimular la compra de productos extranjeros, y así
de esa manera favorecer a la industria local, la que supuestamente podrá
aumentar su capacidad de oferta dentro del país, pero da la casualidad que
nuestras empresas muy pocas tienen la capacidad de surtirse de materia prima
nacional, por tanto al carecer de materia prima nacional, tendrán que
importarla, pero como los lempiras cada día están devaluándose, es lógico que
el precio de esta materia prima aumente constantemente , lo que encarece aun
los productos manufacturados localmente, lo que redunda en una disminución en
la compra de los productos nacionales.
4.- Al devaluar la moneda, se está deprimiendo la capacidad
de compra del pueblo, por tanto ante esta situación el comercio se deprime, lo
que lleva a una disminución del impuesto
sobre ventas y el impuesto sobre la renta entre otros, pues la capacidad
adquisitiva de hondureño se reduce y orienta los pocos recursos para cubrir sus
necesidades básicas.
5.- Al deprimirse las actividades comerciales, esto trae como
lógica una pérdida de fuentes de trabajo, lo que lleva a la población a
incrementar su pobreza y por ende las necesidades básicas insatisfechas, tanto
por aumentar el nivel de pobreza por el desempleo como por la incapacidad del
estado de mantener los medios para compensar la pérdida de ingresos en la
población.
6.-La devaluación acentúa
los índices de pobreza, pues el pueblo es condenado mediante la
devaluación, a subvencionar las exportaciones, lo que favorece el fenómeno de
que los ricos se vuelven mas ricos y los pobres mas pobres, los ahorros de los
pobres, que están en lempiras, estos ven como el valor real se esfuma ante la
devaluación de la moneda, lo que conlleva a otro proceso que es la inflación,
que en Honduras es minimizada, pues la realidad nos dice que las cifras que
maneja el banco central de Honduras, están por debajo de lo real, esto con el
afán de no equilibrar los salarios de acuerdo al índice de inflación.
7.- Al devaluar la moneda, se genera una espiral
especuladora, que presiona al lempira a devaluarlo mas rápidamente, también
esto genera que los comerciantes e industriales nacionales, ya no pueden
planificar sus actividades a largo plazo, lo que lleva aparejado un aumento en
el costo del capital para trabajo, se aumentan los intereses de los prestamos,
la venta de productos y servicios se dolarizan, pero los salarios siempre serán
los mismos pero con un deterioro constante en su poder adquisitivo.
Podemos concluir, que las recetas del fondo monetario
internacional, se aplican a los países pobres, pero no a los países
desarrollados, pues parece que el objetivo es lograr que estos países compren
sus importaciones a más bajo precio, para favorecer a sus connacionales.
También es notorio, que Honduras al disminuir la capacidad de
compra de la población, el estado percibirá menos impuestos, de toda índole, lo
que me lleva a concluir, que al gobierno de Honduras le importa un comino el que el pueblo se empobrezca, pues ya saben que este pueblo ha
llegado a su máximo para ser expoliado por impuestos que se inventan a cada
momento, y que realmente a los gobernantes, lo único que les interesa son los
fondos frescos que pueden obtener vía prestamos, y que empeñará a las futuras
generaciones, pero que permitirá un respiro a las autoridades en su
desenfrenado gasto público, pero para ello, han decidido arruinar la economía
familiar de los hondureños, mediante el aceptar la devaluación de la moneda.
Juzguen ustedes, y ojala un economista hondureño, demuestre
lo contrario de estas apreciaciones, pues desgraciadamente, las teorías
económicas que se enseñan en nuestras universidades, están supeditadas a la influencia de las teorías económicas del
norte, y lo único que hacen es extrapolar esas teorías que en su momento fueron
útiles en esos países, a un país con una idiosincrasia y estructura económica
diferente por ser eminentemente agroindustrial, y no necesariamente productos
esenciales obligados a ser comprados, como nos sucede a nosotros los
hondureños, en donde la materia prima viene del exterior y acá solamente la
envasamos.
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